Original por jgv-usa. Traducción y comentarios por Mario Bórquez Brahm para clubdelperrodemuestra.cl

Este artículo es la continuación o desarrollo natural del publicado previamente: «Las pruebas Alemanas: Otro punto de vista para evaluar perros»

La Herbstzuchtprüfung -HZP en corto- es una prueba avanzada de aptitud natural para evaluar un perro polivalente en su camino a convertirse en un auxiliar de trabajo terminado. La mayoría de los ejemplares participan entre los 10 y los 24 meses de edad.

Una HZP típica con 5 perros toma usualmente un día completo, y consiste en 5 trabajos diferentes que deben ser ejecutados en 3 fases de juzgamiento; búsqueda/muestra, pluma y pelo arrastrados, y trabajo de agua.

En la fase 1, se espera que el perro haga una búsqueda de campo y encuentre/muestre una presa salvaje o liberada. La búsqueda debe ser independiente, intensa. La muestra debe ser útil, es decir el perro debe sostenerla hasta que llega el conductor para hacer volar el ave. Está permitido mostrar pelo.

Los cobros en tierra se hacen sobre una pista en que un ave muerta es arrastrada 200 metros por un campo abierto (dando dos cambios de trayectoria en ángulos obtusos) y dejada a plena vista, claro está sin que el perro vea el trazado del rastro. El perro es llevado por su conductor al punto de partida del rastro (donde el juez habrá dejado algunas plumas del ave y la habrá frotado simulando un punto de caída). A continuación el conductor puede -usando la correa- guiar al perro al inicio del rastro y luego dejarlo ir por sí mismo, momento en que debe abstenerse de dar nuevas órdenes o señas al perro.

Se espera que el perro siga el rastro en el suelo, encuentre el ave, la tome y retorne presta y ágilmente donde el conductor, quien no se habrá movido del punto de partida. Se espera que el perro se acerque al conductor, se siente enfrente o a su lado, y le entregue el ave en la mano a la orden del conductor.

El rastro de liebre o conejo es exactamente igual excepto por la distancia, que es de 300 metros.

No es descalificatorio -pero baja el puntaje- que el perro suelte la presa a condición de que la tome de inmediato y reanude el retorno.

El perro que intente comerse o enterrar la pieza es descalificado, lo mismo que un perro que rehúse cobrar la pieza o, haciéndolo, la lleve en una dirección distinta de la del conductor.

La fase de agua de la HZP consiste en 3 cobros de pato en el agua.

El primero es un cobro marcado, es decir el perro ve el pato que es lanzado al agua, y es enviado a cobrar. Una vez en camino, un tirador designado hace un disparo al pato lanzado por sobre el perro para asegurar que es insensible al disparo en agua.

El perro debe completar el cobro entregando sentado a la mano.

El siguiente es un cobro ciego. Los jueces ponen un pato muerto al otro lado de un tranque (al menos a 30 metros de distancia). El conductor debe enviar al perro con sólo un comando. El perro debe hacer el cobro y entregar sentado a la mano.

Finalmente, en el tercer cobro se libera un pato vivo con las plumas de vuelo removidas en una zona de vegetación en el agua. Se da tiempo al pato para que nade y se esconda antes de lanzar al perro a hacer el cobro, lo que debe ser con un único comando. El perro debe buscar, encontrar, eventualmente capturar el pato y entregarlo sentado a la mano. En este último cobro se busca evaluar la nariz del perro para seguir el rastro del pato en el agua, y la persistencia del perro. El cobro mismo tiene una ponderación secundaria en el tercer cobro.

Los jueces de la HZP evalúan varios atributos durante el día. Además de los 5 evaluados durante la VJP (nariz, rastro, búsqueda, muestra y cooperación), los siguientes atributos son también juzgados:

  1. Deseo: Se requiere que el perro demuestre deseo por trabajar y voluntad para ejecutar cada prueba en tierra y en agua.
  2. Cobro de pato marcado: El perro ve un pato muerto lanzado en el agua y es enviado a cobrar. Durante el trayecto en el agua, se hace un tiro al pato por sobre el perro. Se espera total indiferencia (o mejor, excitación) al disparo. El perro debe completar el cobro,
  3. Cobro ciego: Se examina si el perro hace la búsqueda, cómo la conduce, si encuentra y cobra el pato, y el deseo de cobrar. Se permite un máximo de 10 minutos. La distancia mínima desde donde el perro es lanzado hasta donde el pato fue depositado es 30 metros.
  4. Acoso al pato: Varias características son evaluadas en esta prueba: fuerza de carácter, persistencia en la búsqueda y deseo de nadar.
  5. Ave arrastrada: Se evalúa el deseo de trabajar diligentemente el rastro y el deseo de retornar la pieza al conductor.
  6. Conejo o Liebre arrastrado: Mismo requerimiento, pieza más grande y diferente, más distancia.
  7. Método para entregar: Se espera en cada caso de cobro que el perro exhiba un nivel de entrenamiento para tomar, llevar y entregar la pieza al conductor.
  8. Obediencia: Se requiere que el perro demuestre una respuesta rápida y voluntariosa a la voz, señales con las manos, y el pito. Es evaluada durante toda la prueba pero nunca en presencia de piezas vivas.

Al igual que en la VJP, los perros obtienen puntajes asociados a cada factor, los que son multiplicados por el ponderador del respectivo factor.

El rastro de liebre viva, la nariz, el acoso al pato vivo tienen ponderación 3; La búsqueda de campo, muestra y cooperación tienen ponderación 2; en tanto que el deseo, cobro ciego en el agua, los rastros en tierra y los modales para cobrar tienen ponderación 1.

El puntaje máximo en cada atributo es 11, excepto en los de ponderación 3 (rastro de liebre viva, acoso a pato vivo, nariz) que los jueces en desempeños excepcionales en condiciones difíciles pueden otorgar 12

Un perro que logra sortear la HZP con un puntaje sobre 170 puede ser considerado un magnífico ejemplar de trabajo que brindará servicio a su conductor en cualquier condición a la que se enfrente por la suma de sus atributos naturales y el nivel de adiestramiento y compenetración conductor-perro.

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