En un día clásico de invierno en el centro de Chile, nos juntamos en la plaza de San Nicolás a las 8 de la mañana. Uno a uno iban llegando los perreros, con un poco de frío, con ganas de un café caliente para cargar las baterías. En las camionetas, aguardaban los verdaderos protagonistas de lo que sería una preciosa jornada.
Luego de las inscripciones y sorteos, salimos en caravana al campo. El cielo poco a poco anunciaba un estado más amable para las horas que se avecinaban.
Siete perros concursaron en la Prueba de Aptitud Natural, juzgada por Pierre Souques. Por primera vez sería sobre perdiz salvaje. Sin excepción dieron seña de tipicidad de raza, iniciativa, pasión, ganas, de ésas que, bueno perreros, para qué describirles las emociones que nos recorren al ver en el campo a perros que suplen la falta de experiencia con una energía vibrante. Dos encontraron: Franco (DK) conducido por Sebastián Cozar, y luego Goiko (DD), conducido por Eduardo Arrieta.
Luego vino la Prueba de Iniciación de Búsqueda y Muestra para ingleses, juzgada por Ricardo Pesse, en que fue el turno de Eduardo Galaz y de Andrés Sotelo, con Ninfa y Chaval respectivamente, quienes también mostraron un trabajo típico, con una búsqueda veloz, ordenada y extensa, sin encontrar.
Nos reunimos concursantes, jueces y asistentes -sí, hubo algunos que viajaron hartos kilómetros sólo para ir a mirar- almorzamos un “de todo” con aportes de cada asistente, conversamos, entregamos diplomas a los concursantes del PAN y medallas a los clasificados, brindamos por los perros y la camaradería, y entregamos un galvano de reconocimiento a su trayectoria a nuestro director Francisco Rojas, todo junto a un asado fantástico preparado por el equipo Galaz&Sotelo y otra parrilla donde humeaban tentadoras unas longanizas de Chillán San Carlos.
En la tarde, la Prueba de Iniciación de Búsqueda para los continentales, juzgada por Ricardo Pesse, resultó sin clasificados.
Al día siguiente el cielo estaba amenazante. Cada tanto un chubasco, harto viento. A eso de las 10 de la mañana nos fuimos a otro campo en que hicimos la fase agua de la Prueba de Iniciación de Cobro en un tranque con harta vegetación. Abby (DD), conducida por Marco Sáez, se llevó los aplausos. El ejemplar Fit (DK) conducido por Nicolás Ibáñez, dio cuenta de un buen trabajo a sus ocho meses.
Arcea de Itihue (DK), conducida por Sebastián Cozar, hizo el mejor cobro en tierra. No hubo clasificados en la Prueba de Cobro por Rastro.
En un próximo informe los jueces darán a conocer las súmulas.
Todos los concursantes, sin excepción, algunos más, algunos menos, nos fuimos con tarea para la casa: a pulir el trabajo de los perros.
Y así emprendimos regreso: Un poco mojados, un tanto cansados, y sin duda muy felices, por haber visto a tantos perros y conductores darlo todo, por las ilustres visitas como Florencio Arrivillaga, Fernando Guitart -hijo del legendario Iván Guitart- y muchos más, convocados no por el club, no por el lindo lugar: fuimos convocados por los perros.